Las piezas de ajedrez

Ya hemos visto el “terreno de juego”, ahora vamos a ver las piezas que se colocan en el tablero y en qué posición están al principio de la partida.

Os recuerdo que el buen ajedrecista nunca dice “fichas” para referirse a las piezas de ajedrez.

Veamos que dicen las Leyes del Ajedrez que se adoptaron en el 93 congreso de la Fide, Chennai (India) entrando en vigor el 1 de enero de 2023.

2.2 Al comienzo de la partida, el Blanco dispone de 16 piezas de color claro (las piezas “blancas”); el Negro tiene 16 piezas de color oscuro (las piezas “negras”).

Estas son las piezas una a una, con su nombre, foto, representación en dibujo y en letra:

Rey blanco

Dama blanca

Imagen, dibujo y letra de la pieza de ajedrez, Torre blanca.

Torre blanca

Alfil blanco

Foto, imagen y letra de la pieza de ajedrez Caballo blanco.

Caballo blanco

Foto, imagen y letra de la pieza de ajedrez Peón.

Peón blanco

Rey negro

Dama negra

Foto, imagen y letra de la pieza de ajedrez, Torre negra.

Torre negra

Foto, imagen y letra de la pieza de ajedrez, Alfil negro.

Alfil negro

Foto, dibujo y letra de la pieza de ajedrez, caballo negro.

Caballo negro

Peón negro

Su colocación sobre el tablero es:

Veamos que dicen las Leyes del Ajedrez que se adoptaron en el 93 congreso de la Fide, Chennai (India) entrando en vigor el 1 de enero de 2023:

Artículo 2: La posición inicial de las piezas sobre el tablero

                 2.3 La posición inicial de las piezas sobre el tablero es la siguiente:

Tablero de ajedrez con piezas.

Hay que fijarse bien que la Dama blanca está en una casilla blanca y la Dama negra está en una casilla negra, y por tanto el Rey está en casillo de distinto color.

Todas las piezas iguales están frente a frente.

Más adelante veremos que cada pieza se mueve por el tablero de una forma diferente.

Según su movilidad y eficacia, se suelen dar una valoración del 1 al 9.

Peón = 1

Caballo = 3

Alfil = 3

Torre = 5

Dama = 9

Con estos valores podemos deducir que un Alfil o un Caballo valen igual a 3 Peones.

Capablanca, en su libro de ¿Cómo jugar Ajedrez?, habla del valor relativo de las piezas:

Aunque el Alfil y el Caballo se consideran iguales, Capablanca dice que el Alfil es más valioso en la mayoría de los casos, y que dos alfiles son casi siempre mejor que dos caballos. El Alfil es más fuerte contra los peones que el Caballo, y en combinación con peones también será más fuerte contra la Torre que lo que puede serlo el caballo.

Un Alfil y una Torre también son más fuerte que un Caballo y una Torre, pero una Dama y un caballo pueden ser más fuertes que una Dama y un Alfil.

Al rey no se le asigna valor porque su pérdida supone el fin de la partida, pero como al final de la partida suele tomar parte activa, se le puede asignar un valor de 4, entre Alfil o Caballo y torre.

Este valor no es absoluto, depende de su posición en el tablero, decimos que una pieza es “activa” cuando tiene mucha movilidad, y “pasiva” cuando está bloqueada o arrinconada.

También se habla de pieza “buena” o pieza “mala” por el mismo motivo.

En un intercambio de piezas de distinto valor, decimos que ha ganado la calidad o perdido la calidad según la puntuación sea mayor o menor que la pieza del adversario.

En algunas ocasiones si queremos especificar o concretar más una pieza se añade como “apellido” Dama o Rey según sea la pieza que tiene más cerca:

            Alfil de Dama

           Caballo de Rey, etc.

Material de las piezas

Igual que pasaba con los tableros, existen piezas de muchos materiales, pero para efectos prácticos vamos a ver sólo las

  • Piezas de plástico
  • Piezas de madera.

También existen muchos diseños de piezas, pero hay uno que sobresale de los demás y es el Staunton, que diseñado en 1800, pronto se convirtió en el estándar.

Las primeras piezas de madera se hicieron de ébano para las negras y boj para las blancas.

Hoy día debido al precio de la madera de ébano, sólo se utiliza la madera de boj, tintada con un tinte químico que oscurece el boj para hacer las piezas negras.

Tamaño de las piezas

Howard Staunton que diseñó las piezas, también hizo una clasificación de los tamaños, basada en la altura del Rey y que van en una escala del 3 al 8, siendo la más utilizada el 5 y el 6.

A la hora de comprar un juego de ajedrez es muy importante elegir el tamaño correcto en el que las piezas y el tablero forman un conjunto armónico, esto supone no sólo que las piezas caben en el escaque, sino que también el aspecto debe ser agradable y proporcionado.

Hay 4 medidas que hay que tener en cuenta:

El diámetro de la base del Rey.

El tamaño de las casillas del tablero.

El tamaño total del tablero.

El tamaño de la mesa.

Hay que tener en cuenta también, que en la mesa irá además un reloj y las planillas para apuntar las jugadas y eventualmente el numero de tablero o los nombres de los jugadores.

No hay una norma oficial para estas medidas, pero es admitido por todos que el diámetro de la base del Rey no debe ser superior al 75% del diámetro de las casillas del tablero. Por ejemplo, un Rey con un diámetro de 3,75 cm., el escaque debe ser de 5 cm.

Práctica:

Para afianzar la colocación de las piezas en su sitio exacto, se puede hacer un concurso de colocación de piezas y exactitud.

Nos fijaremos también en la buena colocación del tablero (cuadro blanco a la derecha).

Aprovechamos ésta práctica o concurso para enseñar a los chicos a recoger el tablero y sus piezas y meterlos en el armario.

Es importante que antes de recoger las piezas, se coloquen todas en el tablero y después se metan en las cajas, así se evita que se quede alguna pieza olvidada.